En 1990, el famoso musico francés de new age Jean Michel Jarre anunciaba un nuevo proyecto músical en el cual pretendía realizar un concierto en la zona arqueológica de Teotihuacan. Su argumento se debía a que el 11 de julio de 1991 se presenciaría en México uno de los eclipses más largos del siglo XX. El espectaculo se llamaría Eclipsis y se llevaría a cabo en la noche de ese mismo día. Dicho evento estaría acompañado de un complejo espectadulo de luz y sonido. Esto ultimo es uno de los sellos caracteristicos de los conciertos del músico francés. Jean Michel Jarre adquirió fama mundial a raíz de sus discos Oxygene, Equinoxe y Les Champs Magnetique.
El anuncio del concierto se hizo a nivel masivo por radio, televisión y medios impresos. Sin embargo a falta de algunos meses para el evento, el músico francés anunció sorpresivamente la cancelación de su concierto. Uno de los argumentos que se dieron entonces fue que existían diferencias entre los funcionarios del INAH y los coordinadores de proyecto del músico francés en relación de la instalación de las luces y sonido. De acuerdo al INAH, el proyecto generaría daños graves a la zona arqueológica al remover sedimentos con alto contenido histórico que pondrían en riesgo información valiosa sobre la cultura teotihuacana.
Con el paso del tiempo se dieron rumores de que uno de los verdaderos motivos de la cancelación del concierto se debió a que el estilo del músico francés (quien sería nombrado embajador de la UNESCO algunos años despues) no empató con las expectativas económicas de los funcionarios de aquel entonces. Así que ese ambicioso proyecto murió antes de haber nacido. Sin embargo, en el año 2008 surgue otra historia que tocaremos en el siguiente post.
El anuncio del concierto se hizo a nivel masivo por radio, televisión y medios impresos. Sin embargo a falta de algunos meses para el evento, el músico francés anunció sorpresivamente la cancelación de su concierto. Uno de los argumentos que se dieron entonces fue que existían diferencias entre los funcionarios del INAH y los coordinadores de proyecto del músico francés en relación de la instalación de las luces y sonido. De acuerdo al INAH, el proyecto generaría daños graves a la zona arqueológica al remover sedimentos con alto contenido histórico que pondrían en riesgo información valiosa sobre la cultura teotihuacana.
Con el paso del tiempo se dieron rumores de que uno de los verdaderos motivos de la cancelación del concierto se debió a que el estilo del músico francés (quien sería nombrado embajador de la UNESCO algunos años despues) no empató con las expectativas económicas de los funcionarios de aquel entonces. Así que ese ambicioso proyecto murió antes de haber nacido. Sin embargo, en el año 2008 surgue otra historia que tocaremos en el siguiente post.
Aquí una de las piezas más conocidas de Jean Michel Jarre: Oxygene 2.
